Violaciones que van desde el derecho a la salud hasta el del trabajo, son las que tiene que soportar la comunidad LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales).
Buscando minimizar esto, el Ejército realiza el primer congreso de derechos humanos de grupos especiales que se lleva a cabo en la biblioteca departamental ‘Rafael Carrillo Lúquez’, en donde Jhoana Redondo, de
la Fundación Matices, dijo que “hay unos elementos a nivel jurídico, legales que permiten empezar a dar la pelea, la lucha y el reconocimiento de estos derechos”.
Redondo explicó que también existen unas violaciones que no se ven, porque no se registran y tienen que ver con la vida cotidiana, como es el rechazo al joven homosexual en la escuela, la misma risa burlona y
señalamientos a las personas que son abiertamente homosexuales.
“Ese tipo de violaciones son igual de importantes, la diferencia no es de intención sino de intensidad que da cuenta de una sociedad profundamente homofóbica”, precisó.
Para superar esto, es necesario según la Fundación Matices hablar del tema para ir transformando los imaginarios negativos.
Para el mayor de la Décima Brigada, Álvaro Javier Hernández este congreso permite contribuir con la promoción de estos grupos especiales que se han venido reconociendo.
“Los funcionarios públicos, los estudiantes y la comunidad en general deben tener conocimiento de que estos grupos existen y se deben respetar”.
El evento ha contado con una variada programación que va desde charlas hasta obras de teatro en donde además hablan de la discriminación hacia los afrodecendientes.
Tomado de Vanguardia
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